El síndrome de colon irritable (SCI) comprende un grupo de enfermedades asociados con la defecación o cambio en los hábitos intestinales. La prevalencia del SCI va de 10 a 20% de la población general. Afecta más comúnmente a mujeres que a hombres.
La historia natural de la enfermedad está marcada por aparición de los síntomas, desaparición y cambios en el tiempo. Existen tres formas de presentación clínica, la de predominancia de diarrea, la de predominancia de constipación y la mixta. El tipo de SCI con predominancia de constipación es más común en mujeres. Los factores que influencian esta diferencia de género son la respuesta al estrés, el rol de género, el ciclo menstrual y los síntomas afectivos.
Los hombres y mujeres difieren en el SCI por aspectos cognitivos, autonómicos y antinociceptivos. La frecuencia de depresión y ansiedad y otros problemas psiquiátricos es alta en pacientes con SCI. Hasta el 60% de los pacientes han reportado que tienen problemas psiquiátricos.
La causa del SCI no se conoce todavía muy bien; sin embargo algunos alimentos, los problemas psiquiátricos y gastrointestinales son factores de riesgo para desarrollar SCI. Los síntomas asociados, especialmente los postprandiales, son comunes en estos pacientes. Los alimentos ricos en carbohidratos y grasa son los que causan más problemas. El sexo femenino y la ansiedad predicen un alto grado de los síntomas relacionados a alimentos.
Los pacientes con predominancia de diarrea tienen que ser interrogados con cautela acerca del consumo de alimentos. En el caso de un padecimiento después de una infección, ocurre que los cambios protectivos como el vómito y la diarrea permanecen. En estos pacientes se observa un incremento en linfocitos T de mucosa.
Efectos del ozono
Gracias a sus efectos bactericidal, viricida y fungicida del ozono, así como su efecto antinflamatorio, estimulante de la circulación e inmunidad, el ozono rectal ofrece un tratamiento alternativo para la colitis. En el proceso de reabsorción del oxígeno a través de la pared intestinal se pone en contacto con los productos del metabolism inflamatorio. Elimina la acidez, elimina el medio hipoxico y regenera la mucosa intestinal
El ozono activa la fagocitosis, mejora la inmunidad humoral resultando en una mejora en los mecanismos homeostaticos, restauración del balance de la flora y remite los síntomas inflamatorios. Un incremento en la pO2 en la sangre conduce a normalización de la motilidad intestinal
Finalmente hay un efecto estimulante importante para los aspectos psicológicos del paciente
En pacientes con colitis crónica la ozonoterapia no causa resistencia a la terapia y prolonga el periodo de remisión. Para prolonger el efecto es necesario realizar la terapia 2 a 3 veces al año. Se aplican insuflaciones rectales en series de 20 sesiones 1 a 2 veces a la semana a una concentración ascendente de 10 a 40 mcg