El masaje tailandés, también conocido como Nuad Boran, es una forma tradicional de terapia física originaria de Tailandia que combina acupresión, yoga, estiramientos asistidos y manipulaciones articulares. Este tipo de masaje tiene raíces en la antigua medicina ayurvédica india y en las prácticas espirituales budistas.
Características Clave del Masaje Tailandés:
Acupresión: El terapeuta aplica presión con las manos, pulgares, codos o pies en puntos específicos a lo largo de los “sen” o líneas de energía del cuerpo.
Estiramientos Asistidos: El receptor del masaje es guiado a través de una serie de estiramientos y movimientos que se asemejan a posturas de yoga. Estos estiramientos ayudan a mejorar la flexibilidad y la circulación.
Manipulaciones Articulares: Se incorporan movimientos suaves de flexión y rotación de las articulaciones para mejorar la movilidad y liberar la tensión.
Secuencia Fluida: El masaje tailandés sigue una secuencia específica de movimientos que fluyen de manera continua, creando una experiencia armoniosa y relajante.
Vestimenta: A diferencia de otros tipos de masajes, el masaje tailandés se realiza con el receptor vestido con ropa cómoda y flexible.
Beneficios del Masaje Tailandés:
Alivio del Estrés: El masaje tailandés ayuda a reducir el estrés y promover la relajación profunda.
Mejora de la Flexibilidad: Los estiramientos asistidos ayudan a mejorar la flexibilidad y la amplitud de movimiento.
Estimulación de la Circulación: La acupresión y los movimientos del masaje contribuyen a mejorar la circulación sanguínea.
Equilibrio Energético: Según la filosofía tailandesa, el masaje ayuda a equilibrar las energías del cuerpo, promoviendo la armonía y el bienestar general.
Cómo se Realiza:
Preparación: El terapeuta comienza evaluando la condición física del receptor y adaptando el masaje según sus necesidades.
Movimientos y Estiramientos: Se realizan una serie de movimientos, estiramientos y presiones a lo largo del cuerpo.
Secuencia Específica: El masaje sigue una secuencia específica que abarca todo el cuerpo, desde los pies hasta la cabeza.
Finalización: El masaje concluye con una serie de suaves estiramientos finales y una breve sesión de relajación.
El masaje tailandés no solo se considera una experiencia física, sino también una práctica que influye en la energía vital del cuerpo. Es importante recibirlo de un terapeuta capacitado y comunicarse durante la sesión para asegurarse de que la intensidad y los movimientos sean cómodos para el receptor. Este tipo de masaje es apreciado por su enfoque holístico que beneficia tanto al cuerpo como a la mente.