El campo de la medicina es un tema muy extenso y un tanto complejo, pues la aparición de la historia de la medicina, en palabras de Läin Eirtralgo es la “serie de las actividades personales, colectivas e institucionales en cuya virtud el hombre ha ido realizando (…) para entender, curar y prevenir la enfermedad, más ampliamente para promover la salud”. Sin embargo, estas acciones para prevenir enfermedades vienen acompañados de cierto cuidados especiales que solo se adquieren con otro tipo de especializaciones o ramas de la medicina. Por ejemplo, la enfermería, que se ocupa en ayudar al individuo (enfermo o sano) a realizar aquello que conduce a mantener su salud, que participa, a su vez, de forma autónoma e independiente para ayudar al individuo a valerse por sí mismo lo antes posible
La enfermería consiste fundamentalmente en ayudar al enfermo a cumplir el plan terapéutico establecido por el médico. En su carácter de miembro de un equipo médico, ayuda a los otros miembros, del mismo modo que ellos la ayudan a ella a planear y ejecutar todo el programa de asistencia.
La enfermería brinda aquellas actividades que hacen de la vida del enfermo algo más que un proceso vegetativo, desde el aspecto físico, hasta la contribución del trato social, instrucción, ocupaciones recreativas y otras que, en cierto modo, son lucrativas. Apoyar al paciente enfermo a realizar sus funciones cotidianas ordinarias, o ayudarle en aquello que habitualmente realiza sin ayuda alguna, precisa determinados conocimientos que solo ésta especialización puede lograr, además de poseer un gran sentido ético, actuando con respeto y amor a la vida.
Es este sentido, la enfermería tiene sus raíces en las necesidades humanas fundamentales. Por tanto, el servicio que brinda es íntimo, exigente, y a la vez altamente compensador, en el que la enfermera o enfermero está preparado para prestar.
Los cuidados que proporciona los enfermeros los adaptan de acuerdo a las necesidades de cada enfermo y cómo modificarlos en conformidad con los estados o condiciones patológicos que se encuentran el paciente. De tal manera, es necesario que el enfermero tenga los conocimientos básicos de la medicina.
La enfermería ha experimentado varios procesos de profesionalización, su tarea y responsabilidades en el individuo trascienden dentro de la sociedad y les permite asumir nuevos roles, como extender y capacitar el área de investigación, potencial en el liderazgo y su elevado sentido ético y moral.
El cuidado de la salud y de los enfermos surge desde que ha existido la vida. Preservar la especie y la vida tiene connotaciones religiosas y de sobrevivencia (biológicas), pero son precisamente esos inicios de la enfermería lo que incita al hombre preocuparse por el prójimo y cuidar de los más débiles.
La profesionalización de esta rama de la medicina exige una preparación para llevar a cabo en los ámbitos sociales, por ello, el refuerzo académico es igual de importante que la de un médico o cirujano. Conocer el expediente clínico de cada paciente y la relación entre médico y paciente son algunos ejemplos de los temas que el enfermero debe conocer.
Por parte del enfermo o necesitado de cuidados, tendrá la seguridad y la calidad ante la continuidad de la atención médica si el enfermero se encuentra preparado, pues no cualquiera tiene solo la vocación de cuidar, sino las habilidades, aptitudes y conocimientos que una especialización requiere para la medicina general.
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