La imagen profesional tiene un papel fundamental para las relaciones laborales. La clave de un buen posicionamiento requiere en gran medida, de una comunicación adecuada, pues es necesario transmitir mensajes positivos para la contratación. El 80% de nuestra comunicación representa las formas no verbales que proyectamos; vestimenta, olores, cabello, y otras pistas visuales que demuestran nuestra apariencia, y estos, son detalles que debemos tomar en cuenta.