La rehabilitación geriátrica es el conjunto de actividades sociales encaminadas a buscar la mejor incorporación del anciano a la macrosociedad y microsociedad. Es un esfuerzo cotidiano integrado por un equipo multidisciplinario para devolverle un mejor estado funcional y socioambiental que les ayude a mantener o maximizar la función cuando la recuperación total no es posible.
Tratamiento para el anciano con alteración de la movilidad
Una vez conocido el grado de capacidad existente, se propondrán en función de ella objetivos realizables a través del tratamiento. La fisioterapia debe ser dirigida a aliviar el dolor, aumentar la fuerza y coordinación muscular, mantener y mejorar la amplitud articular, así como también a evaluar y mejorar la marcha y la estabilidad.
La terapia ocupacional persigue mantener la capacidad funcional en las actividades de la vida diaria, mediante la utilización de ayudas y adaptaciones en el propio hogar.
Modalidades terapéuticas
- Uso de agentes físicos
Calor local: Útil para conseguir una buena preparación para la práctica de otras técnicas.
- Calor infrarrojo: 70-90 cm de distancia y menor cantidad de tiempo.
- Ultrasonido en bajas dosis.
- Parafina (tener mucho cuidado con el aumento de temperatura, por los trastornos de coagulación y fragilidad capilar).
- Hidroterapia: Seleccionar métodos adecuados para la zona de tratamiento.
- Diatermia: Dosis subtérmicas, onda pulsátil por 5 minutos.
- Laserterapia, con mucha cautela en casos de procesos neoplásicos.
- Campo magnético: Agente físico por excelencia, aumenta la síntesis de osteoblastos.
- Electroterapia: Tener en cuenta los trastornos sensitivos y aplicación correcta de la técnica, electrodos bien pegados a la piel y utilizar baja intensidad; se aplica la estimulación eléctrica transcutánea.
- Acupuntura: Ser precavidos cuando existen trastornos vaso vágales.
- Cinesioterapia
- Ejercicios pasivos suaves y repetitivos para mantener la movilidad articular.
- Ejercicios activos libres y asistidos para aumentar la fuerza, mantener la coordinación muscular y mejorar la independencia.
- Gimnasia libre individual o colectiva, en círculos de abuelos, según la evaluación funcional.
- Ante fragilidad ósea y arco articular: resistencia gentil y vigilancia de trastornos cardiovasculares.
- Ejercicios de respiración para mantener o mejorar la capacidad respiratoria y evitar complicaciones.
- Entrenamiento de la marcha libre o con apoyo (no se utilizan obstáculos).
- Masoterapia: Auto masaje y masajes gentiles, cuidando de la piel muy sensible. Su efecto es terapéutico desde los puntos de vista físico, mental y espiritual.
- Terapia ocupacional: Importante para conservar activa la función social y familiar, así como los hábitos e independencia de las actividades básicas de la vida diaria (aseo personal, vestido, alimentación y otros).
Aspectos esenciales de la rehabilitación geriátrica
Tener siempre presentes las contraindicaciones y precauciones acerca de los agentes físicos más utilizados para no causar daños al paciente, así como recordar los cambios que se producen en la piel y la sensibilidad de esta.
Lo más importante es enseñar al anciano a que permanezca activo en la realización de actividades funcionales, que le mantengan equilibrado física y mentalmente en su medio social.
Beneficios del ejercicio físico en el anciano
- Mejora la flexibilidad y arcos articulares.
- Aumenta la función intelectual y psicológica, por tanto, ayuda a la autoestima.
- Disminuye los factores de riesgo: obesidad, sedentarismo, tasa de colesterol y hace más efectiva la contracción muscular.
- Mejora la fuerza muscular, de modo que aumenta la resistencia al esfuerzo.
- Evita descalcificación ósea.
- Reduce el peligro de infarto agudo del miocardio.
- Disminuye riesgos de formación de coágulos en los vasos y, por ende, la incidencia de trombos y embolia.
- Incrementa la capacidad respiratoria y oxígeno en sangre, así como refuerza el sistema nervioso y el equilibrio de este con el sistema neurovegetativo.
- Favorece la eliminación de desechos de sustancias en sangre.
- Disminuye la formación de cálculo en los riñones y conductos urinarios.
- Conserva más ágiles y atentos los sentidos.
- Refuerza la actividad intelectual, gracias a una buena oxigenación cerebral.
- Contribuye a conservar el equilibrio psicoafectivo.
Algunos factores entorpecedores del programa rehabilitador
- Déficit sensorial (visión y audición)
- Disminución de las reservas fisiológicas
- Afecciones crónicas
- Presencia de trastornos demenciales y cognoscitivos
- Polifarmacia
- Nivel escolar
- Entorno familiar (sobreprotección o abandono)
- Motivación o miedo
- Barreras arquitectónicas
- Pérdida de los roles sociales, familiares y laborales
- Falta de motivación
http://bvs.sld.cu/revistas/san/vol13_5_09/san14509.pdf